Remodelación de Casa Cuna La Paz: Inversión en Infraestructura, ¿Y el Personal?
La Paz, Baja California Sur.- Con una inversión total que ya supera los 11.5 millones de pesos, el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, junto a la presidenta del Sistema DIF Estatal, Patricia López Navarro, entregó la segunda etapa de remodelación de la Casa Cuna–Casa Hogar de La Paz. El objetivo principal, según se ha destacado, es garantizar espacios dignos y adecuados para el desarrollo integral de la niñez sudcaliforniana.
Esta más reciente etapa de rehabilitación implicó una inversión de 8 millones de pesos. Los fondos se destinaron a la renovación integral de los dormitorios del área de adolescentes, mejoras en la techumbre del patio central, la renovación de plafones en la cocina, la sustitución de cancelería, trabajos de herrería en exteriores y la pintura de murales. Estas acciones se suman a los 3.5 millones de pesos invertidos en la primera fase del proyecto.
Durante su visita, el gobernador sostuvo un encuentro con los directivos y el personal del centro. Reconoció su labor y los exhortó a seguir trabajando con respeto y amor hacia la niñez, a la que calificó como “lo más valioso que tiene una sociedad”. Castro Cosío enfatizó la importancia de garantizar los derechos de los niños y niñas, y reiteró su compromiso de continuar mejorando las instalaciones y procurar su bienestar, en línea con el principio del “humanismo mexicano”.
El mandatario subrayó que el trabajo en Casa Cuna-Casa Hogar es una muestra de la responsabilidad del gobierno con la infancia y destacó el papel crucial de instituciones como el DIF Estatal, que asumen el rol de familia para muchos niños y niñas que carecen de una red de apoyo. “Porque en diversos casos somos la única familia que tienen; una familia que tiene la responsabilidad de cuidarlos, de protegerlos, de no dejarlos solos, de estar siempre cerca de ellos y buscar las mejores oportunidades para poder sacarlos adelante”, concluyó.
Más Allá del Concreto: ¿La Inversión en el Capital Humano del DIF Estatal?
La inversión en la infraestructura de la Casa Cuna–Casa Hogar es, sin duda, una noticia positiva y necesaria para dignificar los espacios de la niñez bajo su cuidado. Sin embargo, en el contexto de estas importantes entregas materiales, surge una interrogante recurrente entre la ciudadanía y observadores: ¿la misma prioridad que se le da a la infraestructura se le está otorgando a la capacitación, el bienestar y la supervisión del personal que interactúa día a día con estos niños y adolescentes?
Es un tema sensible y conocido que, en instituciones encargadas del cuidado de poblaciones vulnerables, la calidad humana y profesional del personal es tan o más crucial que la comodidad de las instalaciones. La labor en una Casa Cuna y Casa Hogar requiere no solo amor y respeto, como bien señaló el gobernador, sino también capacitación especializada en desarrollo infantil, manejo de trauma, psicología infantil, y protocolos de protección. En ocasiones, se ha percibido que las funciones del personal clave en estas instituciones no siempre cumplen con las expectativas más altas, lo que puede afectar directamente el ambiente y la atención que reciben los menores.
La “dignidad” de un espacio va de la mano con la dignidad de la atención brindada por un personal calificado, motivado y constantemente evaluado. Una inversión integral para el bienestar de la niñez debe contemplar no solo techos y dormitorios nuevos, sino también programas robustos de formación continua, apoyo psicológico para los cuidadores, y una supervisión rigurosa que asegure los más altos estándares de cuidado y desarrollo para quienes, como el gobernador apuntó, “en diversos casos somos la única familia que tienen”. Es ahí donde una estrategia de bienestar infantil verdaderamente humanista encuentra su mayor impacto.
